
Cuando él se despertó, el cocodrilo seguía aquí. Dormía en su cama, cada noche.
Él le ponía una manta, una almohada y un vasito de agua en la mesita de noche. Su jefe se horrorizaba cuando supo lo del cocodrilo. Y su madre, y los vecinos, y sus compañeros y la asistenta.
El se reía solo de tanta incomprensión. Son unos necios pensaba él.
¿Es que no puede tener un cocodrilo metafórico en su vida?
Él le ponía una manta, una almohada y un vasito de agua en la mesita de noche. Su jefe se horrorizaba cuando supo lo del cocodrilo. Y su madre, y los vecinos, y sus compañeros y la asistenta.
El se reía solo de tanta incomprensión. Son unos necios pensaba él.
¿Es que no puede tener un cocodrilo metafórico en su vida?
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